Más de 1000 miembros del equipo de Mémora reflexionan sobre el proceso de la vida y eligen las 20 fotografías que compondrán su colección artística exclusiva.
Un proyecto catártico, emocional y humano, que nos involucra a todos en convertir la muerte en parte de la vida.
La naturaleza es el hilo conductor de una narrativa que vertebra la comunicación del grupo desde sus tanatorios hasta sus iniciativas sociales en terapias para grupos de duelo.